El monto de ahorro de las dietas de los legisladores tucumanos se destinaran a comedores escolares, pero esta suma equivale a 7 pesos por cada chico al mes.
Sábado 1ro de febrero de 2020
El pasado miércoles la Legislatura de Tucumán aprobó congelar las dietas y recortar un 10% de las dietas que perciben los 49 legisladores y en los sueldos de los funcionarios “políticos” de la Cámara provincial.
Con este “ajuste” el Poder Legislativo generará un “ahorro” cercano a los $ 8 millones de pesos durante los próximos seis meses, que aproximadamente será 1,3 millones de pesos por mes.
En Tucumán se calcula que son alrededor de 200 mil chicos que concurren a los comedores escolares de la provincia, es decir que este “ahorro” equivale a 7 pesos mensual por cada escolar asistente de un comedor, el precio de una tortilla.
Claramente esto es insuficiente y no llega ni a parecerse ni un “gesto simbólico”. Pero no es de extrañar; como difundió la Agrupación Marrón Docente a partir de un relevamiento que realizaron en las escuelas, el gobierno de Manzur gasta más del doble en publicidad oficial que lo que destina a comedores escolares. El presupuesto de los comedores es menos de $20 por cada chico.
El presupuesto del Poder Legislativo para 2020 ronda los $ 6.300 millones, así que los recortes a los legisladores representan solo el 0,12% de los recursos.
Ahora los legisladores que tienen los sueldos más altos del país pretenden teñirse de solidarios donando miserias a los comedores. Pero nunca trataron ninguna sesión un aumento realmente digno para los niños y niñas que sufren el hambre en toda la provincia y tienen que lamentablemente asistir a un comedor.
El ajuste a la educación también llega ahora a los docentes que son quienes muchas veces están al frente de los comedores escolares y trabajadores de la salud, que están sufriendo el ataque de Manzur con el congelamiento de la cláusula gatillo.
Mientras el Frente de Todos y Cambiemos cierran filas para votar una ley que garantiza la renegociación y el pago de una deuda externa fraudulenta, estos "gestos" de la Legislatura anticipan nuevos ataques al presupuesto educativo y de la salud. Es muy necesario que la docencia incorpore en sus demandas la pelea por el presupuesto educativo y de los comedores escolares, haciendo pesar la fuerza social que puede desplegar en alianza con los estudiantes y sus familias.
