Con un auditorio repleto, diferentes sectores políticos, empresariales y sociales asistieron al inicio del espacio “Tucumán dialoga”.
Maximiliano Olivera @maxiolivera77
Miércoles 25 de noviembre de 2015
El salón que se había preparado en el Colegio de Graduados en Ciencias Económicas quedó chico. Tuvieron que habilitar un nuevo salón para quienes asistieron al primer encuentro de “Tucumán dialoga: mesa de encuentro para la reforma política” pudieran seguir el evento en una pantalla gigante. El ciclo es organizado por las gestiones de Regino Amado (ministro de Gobierno, Justicia y Seguridad) y Carolina Vargas Aignasse (secretaria de Gobierno y Justicia), funcionarios del círculo de confianza del gobernador Juan Manzur.
En este primer encuentro se destacaron en primera fila diferentes actores del arco político. El apoderado del PJ y legislador Marcelo Caponio estaba sentado junto al legislador Federico Romano Norri (UCR) y Ricardo Bussi (Fuerza Republicana). A unas sillas de distancia se encontraba el presidente de la Corte Suprema local Antonio Gandur, escoltado por la vocal de la Corte Claudia Sbdar y Antonio Estofán. Próximo a ellos estaba el arzobispo de la arquidiócesis de Tucumán, monseñor Alfredo Zecca. También participaron Alicia Bardón (rectora de la Universidad Nacional de Tucumán), Catalina Lonac (empresaria y rectora de la Universidad San Pablo-T), Daniel Lucci (empresario citrícola), entre otros. Entre los ausentes se encontraron dirigentes del PRO.
Atentos, escucharon como Manzur y Amado exponía los lineamientos del espacio y sus objetivos: una reforma que trascienda a cambios al sistema electoral, surgida del común acuerdo de todos estos sectores. El gobernador precisó que habrá un tiempo de unos 120 días en donde se realizarán reuniones y mesas de trabajo con representantes de los diferentes partidos políticos e instituciones públicas y privadas. El proyecto final será remitido una vez que esté listo a la Legislatura para su sanción.
Ayer, luego del acto de presentación, Marcelo Leiras, doctor en Ciencias Políticas, docente e investigador de la Universidad de San Andrés, expuso sobre los sistemas electorales haciendo eje en la importancia de la “previsibilidad” de los sistemas que rigen.
La reforma política impulsada por Manzur es una respuesta obligada tras la crisis que suscitó las elecciones provinciales. El sistema de acoples, implementado en la reforma constitucional de 2006, se desgastó y las disputas entre punteros estuvieron a flor de piel.
Repercusiones
El vocal de la Corte Antonio Estofán se mostró “muy contento ya que el gobernador está cumpliendo con lo que prometió” aunque se mostró más cauto a la hora de evaluar los pasos a seguir. Sostuvo que no se asegurar que sea necesaria una reforma constitucional, y que por ahora todo iría por los canales legislativos.
Zecca también mostró su satisfacción, “la Argentina necesita reconciliarse, dialogar y sentarnos todos juntos para ver cómo hacemos grande esta patria”, declaró.
Desde el Frente de Izquierda, Alejandra Arreguez afirmó que “la crisis de agosto y la deslegitimidad de su gobierno impulsaron a Manzur a evaluar cómo cambiar algo para que nada cambie. Buscan una reforma cosmética que no altere la cuota de poder que manejan, los privilegios y los fondos discrecionales para sostener el sistema de punteros”.